Día de los enamorados.
El día de San Valentín es actualmente una celebración, en la cual es tradición regalar flores a la persona que amamos. Es el día más importante para expresar amor, como todos sabemos. Pero, ¿Por qué se celebra el día de San Valentín?, ¿Cuál es su origen? Hoy hablaremos sobre todo esto.
Antiguamente, se celebraba una fiesta pagana dedicada a la fertilidad, denominada Lupercalia. En estas fiestas las mujeres eran golpeadas con látigos hecho de piel de cabras y perros. Creían que
este ritual les iba a otorgar la fertilidad. Más tarde, en el año 496, el papa Gelasio I prohibió esta celebración e instauró el 14 de febrero como día de las fiestas del amor.
Geoffrey Chaucer, escribió un poema titulado Parlamento de los pájaros. En el que por primera vez se hablaba de este día como un festejo de los enamorados. A partir de entonces se comenzó a considerar esta fecha como un día dedicado al amor.
Años más tarde, en 1390, el rey Carlos VI de Francia, creó la Corte del Amor. En este día se efectuarían unos juegos en los que los participantes competían para conseguir pareja entre las doncellas.
En 1416, Carlos de Orleans, escribió una carta a su esposa Bonne de Armagnac; tras ser capturado en la batalla de Azincourt y encerrado en la Torre de Londres. Esta, es la carta más antigua de amor que existe hoy día.
A partir de esto, se fue popularizando en Francia y Gran Bretaña. Y con el paso de los años esta fiesta se extendió por Europa, y se hizo costumbre escribir poemas entre los enamorados.
ORIGEN DEL NOMBRE
El origen del nombre de este día no está muy claro, se dice que puede provenir de uno de los tres mártires del Imperio Romano. Dos de los cuales fueron ejecutados en la segunda mitad del siglo III, en el reinado de Claudio II.
Uno de ellos fue un médico romano, que posteriormente se hizo sacerdote. Comenzó a casar a los soldados, a pesar de la prohibición del emperador Claudio “El gótico”, para que los soldados se centraran en la guerra. El emperador tras enterarse de los casamientos del sacerdote ordenó apresarlo y decapitarlo en el 270.
Cuenta la leyenda que antes de ser ejecutado, curó de la ceguera a la hija de un guardia de la prisión. Y cuando este murió el 14 de febrero, la niña plantó un almendro de flores rosas; simbolizando el amor y la amistad.
Otro de ellos fue un obispo de la ciudad de Interamna, actualmente Terni, Italia. En la que cual se hayan los restos de su cuerpo, conservados en la homónica basílica. El 14 de febrero es la fiesta patronal de la ciudad.
El último fue un obispo llamado Valentín de Recia, que vivió en el siglo V y fue enterrado en Mais, en Tiral, Italia. Posteriormente su cuerpo fue trasladado a Passau, Alemania. Los católicos lo veneran, y es invocado para curar la epilepsia.
Creemos que el sacerdote y el obispo Valentín están enterrados en la Via Flaminia a las afueras de Roma. En el siglo XII, la Puerta Flaminia, ahora conocida como la Porta del Popolo, también se conocía como Puerta de San Valentín.
En la Basílica de Santa María in Cosmedin, en Roma, se encuentra el cráneo del mártir San Valentín que se conserva dentro de una urna de cristal. Sin embargo, poco sabemos sobre las vidas de estos hombres.
Muchas de las leyendas que se cuentan seguramente se inventaron durante la Edad Media, en Francia e Inglaterra. Cuando se empezó a asociar el 14 de febrero con el día del amor, tras la muerte de San Valentín, quien habría sido ejecutado el 14 de febrero.